Ese oscuro fantasma

Dicen que es una sensación inmensa de tristeza que invade el alma. Se aferra al corazón y a la mente, nubla todo pensamiento y succiona la fuerza del cuerpo. Dicen que es terriblemente destructora y que quien cae en sus garras, se va consumiendo poco a poco. Dicen que aunque no te duele nada parece que has recibido una paliza. Dicen que te miras al espejo y la imagen que te devuelve es horrible. Dicen que te quita el hambre, el sueño y las ganas de vivir.

Sin embargo, a pesar de estar sola, terriblemente sola frente a ella, dicen que nadie excepto tu misma puedes ayudarte a salir de ese pozo. Si la propia voluntad, nadie abandona su terreno. ¿Como luchar entonces sin fuerza, sin ayuda y sin voluntad contra algo que lo que requiere para combatirlo son estos tres factores?

Por suerte nunca la he vivido en propias carnes, puede que haya estado en el umbral de verle los dientes...pero estoy convencida de que en mi personalidad no entra caer en ella. Y ese convencimiento es el que me ha obligado, cuando la he visto acechando, a tomar las riendas de mi vida y alejarme de ella.

Somos dueños de nuestras vidas, aunque a veces parezca que no lo somos. Siempre tenemos una opción, aunque creamos que no la hay...Lo que ocurre es que, a veces, el camino a tomar para cambiar nuestras vidas y alejarnos de las garras de la aterradora DEPRESIÓN y la temible apatía, es muy duro, porque supone romper con todo o con casi todo lo que mantenía nustras vidas estables.

Yo prefiero un "terremoto" que lo cambie todo a una "estabilidad" lapidante. Solo espero que ella, mamam (como dirá Grelinno), sepa como ayudar a su amiga sin que la temida depresión se la lleve también a ella por delante. Yo sólo puedo advertirla de los peligros...pero la decisión, como siempre, es sólo suya.