Listo

Para hacer más fácil la espera, para hacerme a la idea de que podía forzar el tiempo a pasar algo más rápido, desde que comenzamos esta nueva cuenta atrás empecé a preparar todo para la llegada de "mi cielo".

Aproveché cada fin de semana que pasaba sóla en casa, uno de cada dos, que son los que peor he llevado. Me hice un pequeño plan para no terminar en un par de fines de semana y luego quedarme de brazos cruzados. Así que un día fue vaciar un armario, otro día reorganizar los estantes del baño... Poco a poco he ido creando un espacio que ahora está vacío para que a principios de año pueda llenarse.

Curiosamente cada vez que lograba ver un hueco vacio me daba la sensación de que la casa se llenaba un poco más. "Mi cielo" la iba llenando con su futura presencia dentro de la propia ausencia. Se que puede parecer una tontería pero esto me ha dado mucha fuerza para sobreponerme de algún que otro mal momento. Pues aunque la espera haya sido bajo la certeza de una meta segura, toda espera tiene sus malos momentos. Por mucho positivismo que uno le quiera echar.

Ahora ya está todo listo, ya no queda nada por preparar...excepto la maleta para irme que la tengo a medio hacer. Tampoco me queda ningún fin de semana sola. El pasado fue el último.

Se me hace extraño, pues en realidad aún no me puedo creer que en menos de dos semanas estaré en Buenos Aires con "mi cielo"... y en tres semanas... ¡¡¡voy a tenerle por aquí, danzando por la casa!!! Es una sensación muy rara el haber estado soñando tanto tiempo con este momento y tenerlo de pronto delante, lo mismo que cuando llegué por primera vez a Buenos Aires...tanto tiempo soñando con sus labios y de pronto sentirlos.

Una nueva etapa está a punto de empezar y otra de terminar, más que nunca lo siento así. Y me siento mucho más tranquila y sosegada que en mi primer viaje, aunque naturalmente ansio sentarme de una vez en el avión y volar...