Plug & Play

Aquí ando haciendo tiempo como cada noche para que "mi cielo" llegue de trabajar y podamos hablar, por msn o por teléfono. Es casí media noche, así que ya falta poquito para que llegue a casa.

Todos los días aprovecho este tiempo para escribir el post, leer otros blogs, hacer o responder a comentarios y perderme por la blogosfera, se ha convertido en todo un ritual.

Hoy, además, he estado preparando la maleta pues mañana me marcho a la playa por tres semanas con mi hijo...hace 5 semanas que no le veo y tengo ya muchas ganas de estar con él. Se que me va a volver loca y me va a borrar el nombre en cuanto me tenga cerca...pero ayer casí me desmayo cuando me dijo que tenía muchas ganas de verme. Desde que di un giro a mi vida, no me había dado semejante muestra de cariño, es más, estaba hasta reticente a estar conmigo. Creo que estas semanas sin verme, estas semanas en las que le he dejado "volar" le han hecho bien. Nunca he sido partidaria de tenerle atado a mis faldas, considero que los hijos te quieren por estar cuando te necesitan y quedarte en un segundo plano cuando lo precisan para madurar y mi hijo en estos últimos dos meses ha madurado y mucho. Ahora viene la tarea de volver a retomar las costumbres de casa, de nuestro hogar.

Hace cosa de una hora que terminé de preparar todo y me puse en el ordenador y sin darme cuenta empecé a releer los 211 e-mails que tengo de "mi cielo". Desde el primero...la verdad es que son todos bonitos, y todos tienen un trocito de su corazón, de su ser, desde el primero en el que con el simple hecho de añadirme a sus contactos de msn comienza a rodar nuestra historia. Pero hay algunos que son indescriptibles, nunca me dijeron cosas tan hermosas, nunca pensé que un hombre fuese capaz de escribir y describir sus sentimientos de una forma tan sensible dirigiendolos directa y abiertamente a otra persona. Nunca pensé que nadie fuese capaz de abrir su corazón por completo aún a riesgo de que le hiciesen daño. Nunca pensé que alguien fuese capaz de dejarse querer intensamente sin sentirse presionado por el compromiso personal que ello conlleva. Nunca pensé que seguían existiendo hombres sin miedo a comprometerse con su pareja, a darlo todo por ella, a dejarlo todo por ella. Y lo que menos pensé es que uno de esos hombres estaba reservado para mi, esperando a conocerme en Buenos Aires.

Y ahora mientras tomo mate, y repaso sus e-mails, releo sus palabras, las hago resonar con su voz en mi cabeza y cierro los ojos intentando sentir sus besos y sus caricias como hace un mes, allí en su ciudad; ahora cuando casi puedo tocar con los dedos la fecha de nuestro nuevo y definitivo encuentro, cuando hacemos planes para las compras de los pasajes, cuando voy siendo consciente de que recibiré el nuevo año junto a "mi cielo"; ahora y en este preciso instante, pienso en unas palabras que él me escribió.

Probablemente muchos esperareis algo cursi y empalagoso...pero "mi cielo" no es nada de todo eso, es romántico, sincero y sencillo, como a mi me gusta (y tampoco pienso poner aquí las cosas más intimas que me dice). Las palabras fueron: "Somos "Compatibles" . No hace falta ningun driver para que funcione esto, somos Plug & PLay. Asi nomás! Y por eso te amo." (se nota que a ambos nos tira la informática, ¿no?). Quizá para otr@s no suene romántico, a mi me emocionó en su día y me sigue emocionando hoy cuando vuelvo a leerlo...porque es justo lo que nos define, lo que define lo que nos ocurrió, no hay mejor manera de explicarlo, de darle forma con palabras. Realmente somos compatibles y no hemos necesitado ningún driver. Fue Plug & Play, desde el primer e-mail, desde la primera palabra on-line, desde la primera conversación telefónica, desde la primera mirada, desde el primer beso y desde la primera caricia. Todos los componentes funcionan y no existen conflictos ni de Hardware ni de Software. Y, además, nos encanta ir "instalando" nuevos programas cada día.